Los locos. Esos que encerramos tildándolos de anormales. Como si fueran tan distintos, no queremos verlos para no vernos en ellos. Nosotros los sanos y racionales. Solo porque creemos cosas parecidas a la mayoría y necesitamos tan desesperadamente creer que eso es lo real. Pero tal cosa no existe, somos solo una patología más. Pero somos mayoría. Nos enjaulamos e individualizamos, creyendo que las cosas son de una sola manera. Mientras los “locos” crean realidades mucho más originales y propias.
La virtud característica del ser humano es la fe. Es querer creer en algo y así hacerlo real. La única realidad es la fe, ya sea en la ciencia, en la religión, etc. Lo que creemos es lo real. Y los “locos" nos asustan, porque cambian las reglas, nos hacen ver que nuestra realidad no es tan nítida ni tan clara como todos creíamos. Entonces los encerramos, porque no juegan con nuestras reglas y entonces no pueden jugar en absoluto. Pero por más envidia que nos dé, ellos seguirán en su propia realidad. Mientras nosotros seguimos atados, a las guerras, el hambre, la inseguridad y otros tantos delirios masivos, mucho menos placenteros.
En el fondo todos queremos romper con el mundo. Dejarlo todo patas para arriba y empezar de cero. Esa es la naturaleza de nuestras almas. Florecer, única y pura como es, más allá de familias, nombres, títulos, rutinas y loqueseas. Pero estamos tan malditamente locos que nos institucionalizamos desde pequeños, para acostumbrarnos a las rutinas y no prestarle atención a las cosas que verdaderamente importan. Evitamos lo que más anhelamos, porque no es o Dios o Diablo. Es anhelo y terror, es deseo y negación. Es diferente y es puro, pero es inseguro e incierto, no es nada cómodo a diferencia de la realidad común. No promete nada, y quizás no otorgue felicidad al final del camino. Te lleva por senderos de vergüenzas, que te aterran y repelen. Te hace realizar pruebas para las que te creías imposiblemente incapaz. Mata tu mascara de comodidad, te mata, para que vivas de verdad por primera vez. Y ya no te preocupes más porque tocaste tu alma en vida.
martes, octubre 28, 2008
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario